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La actriz Irina Baeva aseguró no tener problema alguno con el programa El Gordo y La Flaca, y que ella solamente fue en calidad de acompañante con su novio Gabriel Soto.
“No, no hay ninguna molestia, platicamos tanto con Lili Estefan como con Raúl y no hubo ningún problema, la verdad. Ahí está Gabriel y él fue el invitado al programa para promocionar la obra de teatro; y yo lo acompañe porque de ahí teníamos que salir al aeropuerto”, explicó.
Y reiteró: “No hay ninguna molestía (a Gabriel) le pueden preguntar todas sus razones por las cuales él tomó la decisión de no hacer la entrevista.
“Yo no me lo tomó personal, porque cada quien es libre de pensar lo que quiera… si hay algún problema del otro lado.Yo no tengo problema con ningún conductor, porque yo o me lo tomó personal y ya esto super acostumbrada porque sabemos cómo es eso”.
“No hay ningún problema y les mandamos un beso”, concluyó.
GABRIEL PONE CONDICIONES PARA REGRESAR A GYF
Gabriel Soto también fue abordado en el aeropuerto por las cámaras del show y dijo que de regresar al Gordo y La Flaca solo tiene una condición.
“Lo que sucedió fue que cuando llegué al estudio entre al camerino y prendí el monitor y bueno la verdad es que cuando me presentaron El Gordo le dijo a Lili que iba yo de invitado, y ella comentó, pero ¿qué no ha escuchado todo lo que hemos dicho de él aquí? Lo que me pareció muy fuera de lugar ese comentario”.
Aun así aceptó que el episodio que vivió “es parte de”.
Al cuestionarle si estaría dispuesto a regresar a El Gordo y La Flaca respondió:”Si me invitan de una manera bonita y agradable, sí”.
“NO OCURRIO ASI”: DE MOLINA
Raúl de Molina desmintó las versiones de Soto y Baeva, anque a ella le agradeció el beso que les envió, decidió aclarar: “Eso no fue exactamente lo que pasó ayer y ahora sí lo voy a aclarar, ayer que salí afuera, y Lili salió después de mí, Gabriel Soto ya se iba y ella (Irina) estaba enojada, porque decían por qué venían al programa (de promoción), obviamente enojados de cuando nosotros estuvimos hablando aquí del divorcio de Gabriel Soto y Geraldine Bazán.
De Molina subrayó que Irina era la más molesta, mientras Gabriel buscaba conciliar.
“Estuvimos hablando con él muy bien y le dije te hemos respetado siempre, pero Irina insistía que se marcharan; y el manager que venía con ellos le aconsejó que se fueran.
Aunque deseaban que en El Gordo y La Flaca se promoviera la obra en la que participa Soto, el show también exigió hablar de su relación.
“Creo que no seríamos un programa de entretenimiento si no estuviéramos haciendo nuestro trabajo bien, y si no le preguntáramos de lo que todo el mundo está hablando”, consideró Raúl.
“Por eso a veces nos metemos en problemas”, reconoció.
