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Una herencia de casi 6 millones de dólares y un penthouse en el Hotel Waldorf Astoria de Nueva York le habría dejado el empresario Roberto G. Sada Salinas a Juan Gabriel.
Pero no todo es leche y miel en esta historia porque el cantautor deberá comprobar la existencia de ese dinero y de la propiedad que el empresario regio le dejó como “un regalo”.
Por ello “El Divo de Juárez” decidió abrir un proceso legal en el Juzgado Sexto Civil de Monterrey contra su exmanager Eugenio Alfonso Martínez Benavides, a quien acusa de haberse quedado con los bienes heredados.
El pasado 15 de junio, según consta en el expediente 36/2015, se efectuó una diligencia a la que acudieron a declarar el exmanager y Jesús Antonio Salas apoderado legal de Juanga.
De acuerdo con El Norte, Sada Salinas mantuvo una relación de amistad con el cantante desde hace 20 años.
Un documento notariado que esparte de la demanda consta que el exmanager debió entregar al compositor de Querida el dinero y la propiedad neoyorkina regalado por Sada Salinas, quien murió hace 8 años.
En su defensa el exmanager señala que ese documento carece de validez pues existe otro en el que se deslinda de la entrega del dinero y el penthouse.
Una gran amistad
Roberto G. Sada, hijo de don Roberto Sada e Irma Salinas Ochoa, era hermano de Cristina Sada Salinas, excandidata al Senado de la República en el 2012.
Estuvo casado con Aline Kane, con quien tuvo varios hijos. Pese a que a lo largo de su vida amasó una fortuna se especula que el hijo de uno de los fundadores de grupo Vitro tenía problemas económicos.
Juan Gabriel y Roberto se conocieron en un Palenque de Guadalupe hace unos 20 años, informa SDP Noticias.
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