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Pati Chapoy considera que la fama no sirve para nada, aunque no deja de dar privilegios, pero ella más que abusar de ello, es tremendamente discreta, aunque parezca lo contrario.
“La fama no sirve absolutamente para nada, obviamente que sí hay privilegios, porque de pronto llego a algún restaurante e inmediatamente me pasan, ni dejan haga cola; cosa que agradezco, pero es horrible porque la fama así como te puede servir,te puedes volver una persona soberbia, ciega e intratable”, opinó para Ventaneando, la revista.
Y agregó: ” La televisión te puede sacar lo peor de ti y si uno no esta abusado y tiene la suficiente madurez para que escuches lo que te están diciendo estas mal”.
Como jefa se considera dura y no acepta que sus empleados se sientan divos.
“Al primer berrinchito o decisión de que me voy, porque no me gusta le tomo la palabra, en ese momento. Todos debemos de responsabilizarnos de lo que decimos, hacemos y queremos en la vida”, considera.
Sin embargo, aclara la visión de sí misma es ser una reportera más y no una de las ejecutivas de mayor importancia en Televisión Azteca (tiene a cargo 10 programas).
“Yo nunca me imaginé tener logros ejecutivos, mi visión era muy corta y lo sigue siendo, me gusta hacer entrevistas, sentarme a dialogar con la gente, buscar algo difirente y encontrarme con una noticia, esa es la labor del reportero y pienso como reportera, no como ejecutiva”.
De hecho, recuerda su llegada a los medios fue para poder enterarse de muchos temas, no por tener una cámara enfrente, pero un día entrevistó a Raúl Velasco y su vida cambió al ingresar a Televisa.
Pero no todo es eterno, al paso de los años terminó su labor en dicha empresa y nadie más la deseó contratar.
“Fue una situación difícil, nunca había enfrentado te corrieran de un trabajo o se terminara tu ciclo; un buen día Raúl Velasco decidió que ya no trabajaría con él.En Televisa como en cualquier otra empresa suele suceder que cuando trabajas durante mucho tiempo con un ejecutivo, el resto de los ejecutivos no te contrata”, explica.
Señala fue la amistad de su marido con Ricardo Salinas Pliego su ingreso como asesora a Azteca y creó historia con Ventaneando que trajo un cambio en la manera de dar los espectáculos, aunque reconoce este estilo ya se contaminó.
“Lamentablemente el medio esta muy vitupereado, es a partir de rumores y chismes, una cosa es que critique en base a algo, des la opinion y otra cosa es dar un chisme.Te tachan de chismosa, metiche y ta, ta, ta, pero así es esto, me han colgado muchas etiquetas, simplemente así es, yo no las he provocado es parte de mi trabajo”, dijo resignada.
Tiene 13 años al frente de Venanteando y recientemente declaró se encontraba cansada del ambiente.
¿Se imaginan la TV sin Pati Chapoy?
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